Prensa-Mostradores con Solera

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Información publicada en el periódico La Nueva España de Oviedo, con motivo del libro «Mostradores con Solera» que realizamos para la editorial La cruz de Grao, situada en Gijón. 

Soto del Barco, Mónica G. SALAS ¿Que en Puentecastro (Tineo) los vecinos van a poner inyecciones a un chigre? Suena disparatado, pero así es. En Casa Alonso hay una mujer muy mañosa que tan pronto se pone el delantal como la bata de enfermera. Y es que detrás de la barra de un bar se esconden grandes historias. Unas son entrañables, bonitas, cercanas y otras, en cambio, son puras anécdotas, que ahora quedarán reflejadas para el recuerdo en el libro «Mostradores con solera. Historias del comercio mixto en el Occidente asturiano», que presentará el próximo 3 de enero en Tineo el fotógrafo y periodista Ignacio Pulido, producto de una serie de reportajes publicados entre 2010 y 2011 en LA NUEVA ESPAÑA.

Confiesa Pulido, sentado en una cafetería de su concejo natal, Soto del Barco, que los escenarios donde se desarrollan cada una de sus narraciones «son museos vivientes, que te permiten viajar en el tiempo». Él emprendió ese viaje, con el objetivo de recoger las historias humanas que se beben día tras día detrás de cada uno de los mostradores de los bares- tienda más antiguos de Asturias. Y se topó, según cuenta, con aventuras sorprendentes, llenas de magia, que tomaron vida sobre el papel hace unos años y que ahora vuelven al mismo soporte del que surgieron, pero recopiladas en un libro para evitar que «queden desperdigas» en el tiempo.

Ésa fue una de sus principales motivaciones. La otra, la satisfacción personal que le generó este trabajo durante su desarrollo: «Yo creo que es el mejor que hice en el periódico. O por lo menos del que me siento más orgulloso. Aunque tuve que recorrer muchos kilómetros, con esta serie aprendí muchas cosas, conocí sitios, gente y a nivel fotográfico fue una tarea muy enriquecedora».

Pero, sobre todo, Pulido pudo descubrir estos establecimientos con encanto, convertidos no sólo en locales comerciales, sino también en centros sociales, donde los vecinos de la zona se reúnen cada tarde para charlar y compartir sus experiencias cotidianas, pero que inevitablemente están condenados a desaparecer. De hecho, según precisa el periodista, muchos ya han cerrado y otros tantos han tenido que hacer frente a una importante transformación en busca de mayores beneficios. «La mayoría tuvieron que cambiar de chip: dedicarse sólo a la hostelería, sólo al comercio o concentrarse en una actividad concreta. Por ejemplo, Casa Severón, en Navia, es ahora una ferretería, y en Casa Herminia, en Tineo, encontraron una nueva vía de negocio ofreciendo albergue y comida para los peregrinos del Camino de Santiago», explica.

El libro, que ha sido editado por La Cruz de Grado y diseñado por el estudio Claimedia, está compuesto por 35 reportajes y 120 fotografías en blanco y negro, en su mayoría inéditas. Todos estos artículos aparecen recopilados tal cual fueron publicados en la sección de Comarcas de LA NUEVA ESPAÑA. No se ha alterado su orden -aparecen con la fecha de divulgación- ni se ha cambiado el tiempo de los verbos. Principalmente, porque «el pilar de este trabajo son los testimonios de los protagonistas; el resto es secundario». De todas formas, añade Pulido, «hay un prólogo en el que cuento todos los detalles del libro y también indico que algunos de los personajes de los reportajes ya han fallecido e incluso, que hay bares que han cerrado».

Expectante por la acogida que vaya a tener su primera obra, Ignacio Pulido afirma que le gustaría completar la publicación con nuevos volúmenes de locales del Oriente y el centro de Asturias.

De ésta última zona ya publicó, también en LA NUEVA ESPAÑA, hace un par de años, más de quince. Y como se suele decir, lo difícil es arrancar, así que Pulido sólo tiene que continuar. Por el momento, prefiere centrarse en la presentación, que será, a falta de concretar, en Tineo -por ser el concejo donde se concentran el mayor número de reportajes; en concreto 11- en la Casa de Cultura, el 3 de enero.

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